Delegad@ de Protección de Datos

La figura del Delegado/a de Protección de Datos (DPD) (Artículos 37 a 39 del RGPD y 34 a 37 de la LOPDGDD) es clave en la protección de datos personales.

Sus principales funciones en el ámbito educativo son:

• Asesoramiento e información: Asesorar al personal docente así como a los responsables y encargados de los tratamientos y al personal dependiente de estos sobre sus obligaciones relativas a la de protección de datos.

• Supervisión del cumplimiento de la normativa vigente en la materia.

• Cooperación con las autoridades de control: Cooperar con la autoridad de control y actuar como punto de contacto para cuestiones relativas al tratamiento de datos.

• Atención a las reclamaciones que se puedan plantear y ser el interlocutor con los interesados.

El DPD debe garantizar la confidencialidad en el desempeño de sus funciones y puede realizar otras tareas siempre que no generen conflicto de intereses.

Para que el DPD puede desarrollar sus funciones con garantías debe disponer de:

• Conocimiento especializado del Derecho y la práctica en materia de protección de datos.

• Independencia: Debe poder actuar de manera independiente, sin recibir instrucciones sobre el ejercicio de sus tareas.

• Recursos y apoyo: Debe recibir el respaldo del responsable del tratamiento, facilitando los recursos necesarios para el acceso a datos personales, y para el mantenimiento de su conocimiento especializado.

• Participación en decisiones: Debe ser involucrado desde el primer momento en todas las cuestiones relacionadas con la protección de datos.